Cristina Antoñanzas subraya que la reforma laboral tendrá especial impacto en sectores más feminizados y precarios
Fuente: UGT Confederal
La Vicesecretaria General de UGT, Cristina Antoñanzas, ha intervenido hoy en la Jornada “Mujeres feministas para una agenda sindicalista” donde ha analizado el impacto de la reforma laboral en las mujeres y ha puesto en valor el papel del diálogo social y de la concertación para mejorar las condiciones laborales de miles de hombres y mujeres.
Cristina Antoñanzas destacado la importancia de acuerdos como el de la subida del Salario Mínimo Interprofesional -que se ha ido incrementando desde 2018 hasta llegar este año a los 1000 euros- ya que “ha supuesto una reducción de dos puntos de la brecha salarial entre mujeres y hombres, un dato muy positivo y muy importante que beneficia mayoritariamente a las mujeres que son quienes más cobran el SMI y tienen los salarios más bajos”.
También ha resaltado la importancia de los dos reales decretos de igualdad, el 901 y el 902, donde se abordan los planes de igualdad y los registros retributivos, puesto que “nos van a dar información sobre lo que realmente está pasando en las empresas de más de 50 trabajadores en nuestro país: Cuantos hombres y mujeres hay en las distintas categorías profesionales, realizan formación, cogen excedencias y reducciones de jornada y, si hay desigualdad o incluso discriminaciones, poner medidas para corregirlas y para disminuir la segregación profesional”.
Además, ha recordado que el acuerdo de pensiones, favorece especialmente a las mujeres, porque “consigue, entre otras cosas, recuperar el poder adquisitivo de las pensiones, eliminar el factor de sostenibilidad y se acuerda una subida mayor de las pensiones mínimas, algo que beneficia fundamentalmente a las mujeres que son quienes tienen las pensiones más bajas”.
La lucha contra la precariedad beneficia especialmente a las mujeres
Antoñanzas ha subrayado varios elementos relevantes del acuerdo de la reforma laboral como, en primer lugar, que limita la contratación temporal y sienta las bases para que el contrato generalizado sea el indefinido, “algo que tiene consecuencias positivas tanto en hombres como en mujeres”. En segundo lugar, que recupera la ultraactividad de los convenios, lo que mantiene los sueldos y, por tanto, el poder adquisitivo. En tercer lugar, ha incidido en la modificación del artículo 42 del ET, sobre contratas y subcontratas, que supone que se aplique el convenio del sector, lo que implica que los salarios se vean revalorizados y, por último, la prevalencia del convenio del sector –que suele tener mejores condiciones- sobre el de empresa.
“Todas estas legislaciones acordadas mejoran las condiciones laborales y salariales y actúan sobre todo en la precariedad por lo que tendrá un impacto directo sobre las mujeres” ha añadido, “lo que será un punto de inflexión si, además, se negocian los planes de igualdad en las empresas y en las Administraciones Públicas”.
2022 debe ser un punto de inflexión en la reducción de brechas y la recuperación de derechos