03/10/2024
Los datos de paro correspondientes al mes de septiembre reflejan una alarmante brecha de género, donde las mujeres representan el 97% del aumento del desempleo en el último mes. De las 3.164 personas que engrosaron las listas del paro en septiembre, 3.080 son mujeres, mientras que los hombres apenas incrementaron en 84 personas.
Esta disparidad evidencia la profunda desigualdad que persiste en el mercado laboral. A pesar de que el número total de personas desempleadas alcanzó las 2.575.285 personas, la cifra más baja desde 2007, la realidad para las mujeres sigue siendo más dura. En total, las mujeres constituyen el 60,3% del desempleo registrado, confirmando que la recuperación económica y la creación de empleo están dejando atrás a una parte significativa de la población femenina.
Además, este aumento de la brecha se da en un contexto donde el empleo total crece, con 473.411 personas más afiliadas a la Seguridad Social en comparación con el año anterior. Sin embargo, las oportunidades laborales continúan siendo desiguales entre géneros, algo que requiere medidas urgentes para garantizar una verdadera equidad.
En este sentido, nuestra primera reivindicación es exigir el cumplimiento en todas las empresas españolas de la normativa vigente en materia de Igualdad Retributiva recogida en el Estatuto de los Trabajadores y en el Real Decreto 902/2020 aprobado hace cuatro años fruto del diálogo social. En mayo de 2023 se aprobó la Directiva (UE) 2023/970 del Parlamento Europeo y del Consejo de 10 de mayo de 2023 por la que se refuerza la aplicación del principio de igualdad de retribución entre hombres y mujeres por un mismo trabajo o un trabajo de igual valor a través de medidas de transparencia retributiva y de mecanismos para su cumplimiento. Ahora exigimos que se convoquen las mesas de diálogo social para transponer a nuestra normativa nacional todas las novedades introducidas para alcanzar la transparencia salarial en todas las empresas.
También exigimos al Gobierno que analice en profundidad y realice las modificaciones necesarias en el contrato a tiempo parcial y en su utilización que está provocando en la actualidad una discriminación salarial hacia las mujeres. Es necesario disponer de estadísticas que analicen la ocupación y el nivel de estudios desagregados por sexo y edad para analizar con mayor precisión que sucede con las mujeres jóvenes que a pesar de sus niveles de formación académica perciben salarios inferiores a los hombres de su misma edad.
Reivindicamos que haya planes de actuación de la Inspección de Trabajo en materia de igualdad retributiva entre mujeres y hombres, para que actúen de oficio en aquellas situaciones donde se infravalora el trabajo de las mujeres. Para ello son necesarios criterios claros sobre registros retributivos, valoración de puestos de trabajo y auditorías retributivas.
Por último, incidimos en la necesidad de que el Gobierno destine fondos como indica la Directiva de Transparencia Salarial, para la formación de las personas negociadoras de convenios colectivos y planes de igualdad, en su artículo 11: “Apoyo a los empleadores con una plantilla inferior a 250 trabajadores. Los Estados miembros prestarán apoyo, en forma de asistencia técnica y formación, a los empleadores con una plantilla inferior a 250 trabajadores y a los representantes de los trabajadores de que se trate, a fin de facilitarles el cumplimiento de las obligaciones establecidas en la presente Directiva”.