El sindicato apoya un paro en defensa del Diálogo Social y de la mejora de la situación socioeconómica de los trabajadores marroquíes
Las organizaciones sindicales marroquíes Unión Marroquí del Trabajo (UMT) y la Confederación Democrático del Trabajo (CDT) han convocado una huelga general para este miércoles 5 de febrero, que llega como respuesta a la falta de diálogo social para la elaboración de la Ley de Huelga en Marruecos.
El proyecto de ley se ha venido elaborando sin consultas a las organizaciones sindicales del país y sin incluir sus demandas. Tramitar una ley de huelga, una de las grandes demandas históricas del sindicalismo marroquí, sin utilizar los canales propios del diálogo social supone un verdadero agravio a la clase trabajadora marroquí y a sus legítimos representantes.
La huelga general es una herramienta propia y legítima del movimiento sindical que se encuentra dentro de la propia libertad de acción, por lo que, obviando la opinión del sindicalismo, se deslegitima el instrumento legal.
En este sentido, la Unión General de Trabajadoras y Trabajadores quiere mostrar todo su apoyo y solidaridad con sus organizaciones sindicales hermanas CDT y UMT en esta más que justificada huelga general.
Un gobierno que no cree en el diálogo social da la espalda a los y las trabajadoras y trabajadores de su país y demuestra no tener interés alguno en hacer políticas para mejorar la realidad de la clase obrera.
Garantizar un verdadero proceso de diálogo social
Las y los trabajadores marroquíes enfrentan un contexto económico cada vez más precario, caracterizado por bajos salarios, una inflación descontrolada y una constante pérdida de poder adquisitivo y, a pesar de los crecientes desafíos económicos, las autoridades no han implementado medidas efectivas para mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía, ni garantizar una distribución equitativa de la riqueza. Por todo ello, el sindicato celebra y defiende que las confederaciones marroquís utilicen también esta jornada de huelga para exigir cambios inmediatos que mejoren la situación de la clase trabajadora en el país africano.
UGT manifiesta su solidaridad con las y los trabajadores marroquíes y las organizaciones sindicales UMT y CDT en su lucha por condiciones laborales dignas, salarios justos y una legislación laboral que respete los principios democráticos y los derechos fundamentales.
Es imprescindible que el gobierno marroquí escuche las legítimas reivindicaciones de los sindicatos y garantice un verdadero proceso de diálogo social que ponga en el centro el bienestar de la clase trabajadora. La justicia social y el respeto a los derechos laborales no pueden ser negociables.