UGT ha incluido en la ley una enmienda que obligará a las empresas de más de 50 trabajadores a tener planes que garanticen el respeto a la diversidad de orientación afectivo sexual y de identidad y/o expresión de género
La Unión General de Trabajadoras y Trabajadores considera un éxito para el conjunto de la sociedad la aprobación de la Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI que ha tenido lugar hoy en el Congreso de los Diputados. Una mayoría parlamentaria ha reconocido la importancia que este texto para las personas LGTBI, que viven situaciones de discriminación que no se pueden tolerar en un país democrático.
La ley aprobada solo es un primer paso para alcanzar la igualdad real y efectiva para las personas LGTBI y para solucionar situaciones que el sindicato considera especialmente preocupantes, como las tasas de desempleo y precariedad entre las personas trans, los niveles de desconfianza por parte de las personas LGTBI a salir del armario en el empleo o las cifras de agresiones registradas a personas LGTBI en el puesto de trabajo.
UGT lleva años trabajando para garantizar que las personas LGTBI puedan desarrollar carreras profesionales y socializar en el lugar de trabajo con total libertad, sin miedo y sin merma de derechos laborales. En este sentido, considera la aprobación de la Ley Trans y LGTBI un enorme avance en derechos en nuestro país, y por ello continuará estando al lado de cada trabajadora y trabajador LGTBI para garantizar que los derechos reconocidos legalmente lleguen de manera efectiva a todos y todas.
Las empresas con más de 50 trabajadores obligadas a contar con planes y protocolos LGTBI pactados
El sindicato celebra especialmente la inclusión en el texto final (artículo 15.1 de la norma) de la enmienda propuesta por UGT en solitario a los grupos parlamentarios, que obligará a las empresas de más de 50 trabajadores y trabajadoras a contar con planes pactados en el Diálogo Social y diferentes protocolos que garanticen el respeto a la diversidad de orientación afectivo sexual y de identidad y/o expresión de género en el empleo.
Esto situará nuestro país un paso más cerca de contar con lugares de trabajo verdaderamente inclusivos y mejorará las vidas cotidianas de muchas personas LGTBI trabajadoras.