Es necesario dotar a los Servicios Públicos de Empleo de recursos e impulsar verdaderas Políticas Activas de Empleo
Los datos de paro y de afiliación a la Seguridad Social del mes de septiembre publicados por el Servicio Público de Empleo (SEPE) han registrado un aumento del número de personas en desempleo, reflejando la estacionalidad propia de un mes marcado por el fin de la campaña de verano.
No obstante, este incremento es menor al registrado en otros años, por lo que todo apunta a una moderación de la alta estacionalidad y temporalidad característica de nuestro mercado laboral. Así, los datos conocidos hoy muestran una creciente solidez en la creación de empleo, que, quitando la componente estacional, aumenta por decimoséptimo mes consecutivo, a pesar del incierto contexto político internacional en el que nos encontramos. En suma, sigue creándose empleo de calidad, en tanto los contratos indefinidos suponen un 46,7% del total de contratos firmados, cumpliendo así el objetivo de la reforma laboral de poner fin a la excesiva temporalidad predominante en nuestro mercado laboral.
Sin embargo, a pesar de la mejora de las condiciones laborales, la situación socioeconómica de las personas trabajadoras continúa viéndose muy resentida como consecuencia de los efectos de la guerra de Ucrania sobre la capacidad adquisitiva de los hogares. Las altas tasas de inflación, el aumento de los tipos de interés, y las moderadísimas subidas salariales, se combinan para hacer a la clase trabajadora la principal víctima de la crisis internacional.
La negativa de la CEOE a firmar un nuevo Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) que asegure subidas salariales justas, como parte de un pacto de rentas que distribuya de manera equilibrada los costes de la situación actual, manifiesta la falta de miras y la poca responsabilidad de la patronal para el buen devenir de la economía española.
Es la hora de subir salarios
En un momento difícil con un crecimiento de la inflación y del coste de la vida desbocados, es fundamental reabrir las negociaciones con la patronal para cerrar los miles de convenios bloqueados y alcanzar un acuerdo general de salarios, para ello UGT y CCOO han convocado un calendario de movilizaciones que comenzará el próximo 7 de octubre, continuará en otoño y tendrá un punto de inflexión en la gran movilización del 3 de noviembre en Madrid.
El Gobierno debe actuar e incentivar la subida de los salarios e ingresos de los hogares, comenzando por elevar el SMI y, a la vez, reforzar el escudo social, destinando más medios a combatir el aumento de la desigualdad. Los ingresos extraordinarios que se pretenden obtener a partir de la nueva reforma fiscal deben ir orientados en esta dirección, permitiendo la financiación de cuantos programas de gasto e inversión sean necesarios para blindar y ampliar el Estado de Bienestar.
Los buenos datos en materia de empleo no deben hacernos olvidar la situación en la que se encuentran un gran número personas que llevan años en situación de desempleo. Según la última EPA, casi la mitad de las personas desempleadas llevan más de un año buscando empleo, mientras que un tercio lo hacen desde hace más de dos años. Por ello, UGT reivindica la importancia de dotar a los Servicios Públicos de Empleo de recursos necesarios para que puedan desarrollar su labor de manera eficaz, e impulsar Políticas Activas de Empleo con programas y servicios que se adapten a las necesidades específicas de cada persona, brindándoles así la posibilidad real de lograr una rápida y adecuada inserción laboral.
Valoración de Pepe Álvarez sobre los datos de paro de septiembre