El sindicato considera intolerable que hayan primado, exclusivamente, los intereses económicos para la celebración del Mundial de Fútbol 2022 en Qatar, por encima de cualquier otra consideración moral.
En próximas fechas, dará comienzo el mayor espectáculo deportivo del mundo, que atrae la atención de una gran parte de la población del mundo. El Mundial 2022 se desarrolla en Qatar, un país que, por un reparto de poder absolutamente desigual, vulnera los Derechos Humanos Fundamentales y que muestra un desprecio total hacia las vidas de miles de personas –verdaderos esclavos.
La seguridad y salud en el trabajo, una utopía en Qatar
Las condiciones de seguridad y salud en el trabajo se asemejan mucho a la esclavitud, estando muy lejos de las de un trabajo digno, seguro y saludable. La explotación laboral y las precarias condiciones de trabajo han provocado miles de muertes y enfermedades relacionadas con el trabajo.
Así, miles de personas trabajadoras migrantes han muerto durante la construcción de las distintas instalaciones en las que se desarrollará el Mundial de fútbol y sus familias no han recibido compensación alguna. Las causas: largas jornadas laborales, exposición a temperaturas extremas, etc. Aunque desde el Gobierno de Qatar se atribuyen estas muertes a causas naturales.
La desigualdad y discriminación de las mujeres
Las mujeres sufren el sometimiento, no pueden desarrollarse personal ni laboralmente, no tienen libertad de movimiento, se les niega la participación en la vida pública, no son dueñas de sus decisiones, sino que tienen que pedir permisos a su tutor para salir del país, casarse o trabajar en algunos puestos.
La desprotección aumenta en el caso de que una mujer denuncie una violación, ya que la violencia de género no se tipifica como delito en el Código Penal.
Si eres mujer y eres feminista o hablas abiertamente sobre política en Qatar y te opones al sistema, serás arrestada, desaparecida por la fuerza y encarcelada.
LGTBI fobia
La población LGTBI+ está acallada y oculta; lo contrario les expondría a penas de más de 5 años de cárcel. Recientemente, hemos tenido pruebas manifiestas de la intolerancia existente en este país hacia el colectivo con declaraciones por parte del Embajador del Mundial de Qatar, calificando la diversidad sexual de “daño mental”.
Por otro lado, Qatar es un país que niega, rechaza, limita y castiga cualquier expresión de libertad manifestada por quienes no disfrutan de los privilegios de los que se benefician quienes son protegidos del poder.
A pesar de los esfuerzos realizados desde los poderes por blanquear las decisiones tomadas, no parece que se vaya a producir ninguna revolución progresista hacia el avance en derechos para las personas; puesto que ni siquiera existe un cuestionamiento o debate entre aquellos que quieren y deciden mantener estas estructuras de poder que hagan esperar reformas legislativas o cambios en la forma de gobierno.
UGT considera que este desprecio hacia los Derechos Humanos debe tener una respuesta determinante por parte de quienes rechazamos el poder totalitario y apostamos por el progreso y el respeto a los derechos de la ciudadanía, porque NO TODO VALE.
