La Secretaria de Políticas Europeas de UGT interviene en un ciclo de conferencias de la Agrupación Europeísta “Cuidar el Futuro” sobre el presente y el futuro de Europa
“Necesitamos más Europa para poder hacer frente a los retos globales sin dependencias de terceros países”, ha considerado. “Una Europa fuerte, solidaria y competitiva, que haga bandera de su pilar social como fuente de cohesión social. Europa y su ciudadanía deben mostrar una clara unidad y un compromiso irrenunciable con sus valores, su pilar social, y su estrategia de gobernanza”.
En este sentido, ha resaltado la posición de UGT para impulsar los derechos sociales dentro de la Unión. “Hemos participado directamente en la elaboración de distintas normas, como la de la erradicación del sinhogarismo, planes de acciones de la Comisión y en la presentación de iniciativas propias como la de la semana laboral de 32 horas o la de la necesidad de un cambio en las políticas fiscales de la Unión. Desde UGT apostamos por una Europa comprometida y cohesionada, que aproveche el instrumento Next Generation y la estrategia del Pacto Verde para consolidar la triple transición (socioeconómica, digital y ecológica), garantizando la igualdad de oportunidades para la ciudanía. El objetivo es claro, crear una Europa más verde, digital, socialmente justa y resiliente, que se convierta en la matriz económica y social transformadora de la UE en su conjunto”.
De esta forma, ha señalado que “las políticas de transición deben estar diseñadas y orientadas por pactos de concertación social entre autoridades en todos los niveles e interlocutores sociales, a fin de que supongan una transición inclusiva para las personas trabajadoras, para las personas consumidoras y para la ciudadanía en general. La transición energética no es únicamente una cuestión tecnológica y de inversión pública y privada, sino un profundo desafío social global, por lo que debe garantizarse y promoverse la participación de la sociedad civil y de la sociedad laboral productora (empresas y personas trabajadoras, de forma directa y a través de sus representaciones)”.
Políticas de transición medioambiental más ambiciosas
Mari Carmen Barrera ha afirmado que “los marcos Europeos de la Unión de la Energía y del Pacto Verde son correctos, pero insuficientes para implementar unas políticas climáticas y energéticas que garanticen la cohesión social y regional a través de inversiones intensivas en innovación tecnológica, creación de empleo de calidad sostenible, capacitación del capital humano y creación de capital social regional”.
Por ello, ha reclamado que las políticas de transformación energética “sean más ambiciosas. El coste de la falta de ambición en estas políticas de transformación energética europea justa se estima en un 5,6 % del PIB de la UE en 2050. Evitar este coste requerirá garantizar el resultado de una transición justa, también en términos de empleo”.
Además, ha demandado que “se incorporen al Semestre Europeo nuevos y mejores indicadores sociales, económicos y medioambientales mensurables y complementarios para supervisar y efectuar un seguimiento de todos los principios del pilar europeo de derechos sociales y los ODS, con especial énfasis en el balance final de los empleos de calidad sostenibles creados; y que la Comisión Europea introduzca reformas en su legislación de clima incluyendo el concepto de “desafíos de la transición ecológica” en la normativa laboral, fomentando las acciones necesarias para que las experiencias y prácticas de regulación, así como de gestión empresarial y negociación colectiva se difundan en el conjunto de la UE”.